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Las tarjetas SD / micro SD, esas pequeñas memorias indispensables para cámaras, móviles y tablets. Elegir una se puede volver difícil porque cuando buscas en la tienda u Amazon te encuentras un montón de modelos de diferentes capacidades, clases, velocidades y con letras que tal vez no entiendas. Y debes tener cierto cuidado, porque no hay una tarjeta universal que ande bien en todos lados. Vamos a ver lo más importante qué las diferencia y cuál es el modelo ideal para tu cámara o móvil.

Lo referente a tamaños es lo más sencillo. Primero están las habituales tarjetas SD, las más grandes y que se utilizan en cámaras de fotos. Por otro lado, están las Micro SD, mucho más pequeñas y habituales en móviles. Como probablemente en algún momento quieras pasar las fotos de tu cámara al móvil, pues mejor te compras una Micro SD con adaptador a SD, que sale casi lo mismo.

Para elegir una buena SD debes decidir la capacidad que necesitas. Hoy en día lo más común son capacidades de 8, 16, 32, 64 y 128 GB. Esto va a determinar cuantas fotos / vídeos o aplicaciones puedas guardar en ellas. Considerando la calidad de las nuevas cámaras, al menos 16 GB es lo ideal, incluso más si quieres tomar mucho vídeo Full HD o 4K.

A modo de ejemplo, en una tarjeta de 16 GB puedes guardar aprox. 1600 fotos de 20 MP, 4:17 hs de vídeo Full HD y 4.000 canciones en MP3. 

La capacidad también determina el tipo de tarjeta que es. Las SD básicas que se venden ahora, con capacidades de 2 a 32 GB son llamadas "SDHC". Las más premium, que van desde los 32GB a los 2TB se llaman "SDXC". Esto lo puedes ver en el frente de cualquier tarjeta que compras, y debes, y esto es MUY IMPORTANTE, estar seguro de que tu dispositivo soporta el tipo de tarjeta que vas a comprar. 

Para aclarar esto, si tu dispositivo es compatible con SDXC, las SDHC también funcionarán. Sin embargo si solo es compatible con SDHC (típico en dispositivos que soportan un máximo de 32 GB) las SDXC no funcionarán. 

La mayoría de móviles gama alta y camaras de hace un año soportan memorias de 128 GB (SDXC). Sin embargo, algunos gama media como el Moto G lo limitan a 32 GB, así que revisa bien

La velocidad es importantísima para tener un buen rendimiento en la memoria que compres, sobre todo en las cámaras de fotos. Se mide de varias formas, así que vamos de a poco.

Primero están las clases, como son 10,6,4,2 etc. Esto se puede ver en un pequeño circulo en el frente de la memoria que compras. Lo que miden las clases es la velocidad mínima de transferencia, en MB/s (megabytes por segundo). Se nota mucho por ejemplo cuando tomas fotos en ráfaga. A día de hoy, con un dispositivo moderno no deberías bajar de clase 10, pero si la necesitas para escuchar música o cámaras de no muy alta resolución, una clase 4 o 6 te valdrá bien. 

Lo IMPORTANTE es que ves la velocidad de escritura de tu dispositivo en internet o el manual, y compres una tarjeta que cumpla esa velocidad. No vas a comprar una Clase 2 para grabar en Full HD porque te va a dar problemas. Si no encuentras este dato, esta tabla te puede ayudar:

En el caso de que elijas una clase 10, vas a ver que hay un rango muy grande de velocidades. Tal vez veas un número en la tarjeta como 30 MB/s hasta 95 MB/s, siendo esta la velocidad máxima que la tarjeta puede alcanzar. Esto es importante más que nada para vídeos de muy alta resolución, fotografía profesional o 4K, ya que con una de 40 MB/s estarás bien en la mayoría de los casos.

Por último, hay dos clases extra de tarjetas, las U1 y U3, que usan la nueva tecnología "Ultra High Speed". Las U1 tienen una velocidad mínima de 10 MB/s como las calse 10, aunque pasan pruebas más rigurosas. Las U3 son las que se recomiendan para 4K, con una velocidad mínima de 30 MB/s, pero se nota bastante la diferencia de precio. Recuerda que tu dispositivo debe ser compatible con UHS (Ultra High Speed) para aprovechar el incremento de velocidad, aunque si no lo es funcionará igual.

Para terminar, hay algunos extras en las tarjetas que tal vez te vengan bien. Primero, están lasSD Wi-Fi (solo SD en este caso), que tienen un pequeño chip integrado para tener conectividad inalámbrica, como la Eyefi. Estar tarjetas son muy prácticas para acceder a las fotos de la cámara directamente desde el ordenador, aunque recuerda que no todas las cámaras son compatibles. Como otro extra, están los adaptadores de MicroSD a USB, baratos y que te sacan de un apuro.

Ahora que ya sabes lo más importante, es momento de pasar a las tarjetas recomendadas. En la siguiente nota comento que tarjeta es mejor por ejemplo para una cámara reflex o un móvil, un móvil de los gamas media u otros usos: